Frithjof Schuon, portavoz eminente de la sophia perennis en nuestro tiempo, nos ofrece en este libro varios ensayos de gran calado intelectual en torno a la fe y la intelectualidad, las manifestaciones del principio divino, la caridad, los modos de la oración y los seis aspectos esenciales de la sabiduría espiritual.
En este importante libro, Frithjof Schuon trata de diversas cuestiones fundamentales en torno a la religión en sí y por otra parte da respuestas a los problemas que plantea la relación entre la religión y la mentalidad moderna, entre la fe y la ciencia. Como dice el autor, la escisión entre fe y ciencia tiene sus raíces, paradójicamente, en la fe misma, al menos en su aspecto extrínseco y subjetivo, en el sentido de que ésta no se ha visto suficientemente apoyada en comentarios de carácter sapiencial o de que en la conciencia de la mayoría han tenido más peso las razones sentimentales que las metafísicas. Esta ausencia del elemento intelectual en la fe, unida a la «mundanidad intelectual» dominante desde el Renacimiento y Descartes que ha provocado el debilitamiento de la inteligencia contemplativa y del instinto religioso, hace difícil, para el hombre moderno imbuido del espíritu científico y racionalista, la comprensión en sus justos términos del lenguaje simbólico y alusivo de la religión. Por eso lo que se impone, dice el autor, en una época en que las formas del espíritu se ven amenazadas tanto por la inconsciencia de los hombres como por una hostilidad preconcebida, es situar en un clima sapiencial las verdades por las que el hombre siempre ha vivido y debería seguir viviendo. Schuon, desde su posición eminentemente intelectual, analiza y dilucida brillantemente todos estos problemas y también dedica sendos capítulos a cuestiones tan centrales como la noción de caridad o los modos de la oración; finalmente, en el último capítulo, que da título al libro, recapitula y resume las etapas de la vida espiritual.